Muchos de los procesos biológicos de los cultivos agrícolas requieren de la radiación solar. El registro de esta variable es escaso en comparación con la temperatura y la humedad y más aún en las zonas rurales. Los modelos empíricos junto con la información proveniente de las imágenes satelitales se constituyen en dos herramientas que permiten estimar la radiación solar. El objetivo de estudio fue evaluar y comparar la radiación solar registrada con aquella obtenida a partir de CERES y con la estimada por el modelo de Hargreaves-Samani, para la estación meteorológica de la EEA Manfredi del INTA. Los resultados mostraron que ambas estimaciones presentaron buenos ajustes, siendo la basada en datos de CERES superior a la obtenida por el modelo de temperatura. Se concluye que es posible emplear la radiación solar proveniente de CERES y la estimada con Hargreaves-Samani como sustitutos en caso de no poseer registros de esta variable.