El principal recurso forrajero de los sistemas de producción ganaderos de la región es el pastizal natural. Desde la colonización española, estos pastizales han sido sometidos al pastoreo continuo del ganado doméstico que ha causado severos cambios en su estructura y funcionamiento y que han provocado su deterioro. La carga animal ha aumentado significativamente, lo que agrava el riesgo del deterioro que atenta contra la conservación del ecosistema pastizal, el cual cumple un importante rol, albergando a una riquísima fauna y flora de las más importantes en el continente americano.