Desde el inicio del trabajo se buscó aplicar los conocimientos sobre las propiedades de la madera de sauce para otorgarle mayor valor, debido a que es un recurso desaprovechado.
Además, se intentó responder a las necesidades de los habitantes de viviendas sociales. A partir de esto, se tomaron problemas de los mobiliarios, como el uso intensivo y el desgaste diario, y otros inconvenientes vinculados a la madera, como la tendencia a torcerse y su flexibilidad. Se proyectó una familia de muebles compuesta por una mesa y sillas de comedor, una cama simple y otra matrimonial y un conjunto de muebles de guardado que pueden ubicarse en distintos espacios de la casa.
Las sillas fueron planteadas como una monopieza. Se pensó en una estructura cerrada en la parte inferior que resalta la idea de durabilidad. Además, los encastres diseñados logran una buena resistencia.