En los últimos años la mayoría de Escuelas, Departamentos y Facultades de Abogacía han comenzado y/o concretado sus procesos de reformas curriculares; y en todos ellos se destaca la preocupación por superar las prácticas formativas tradicionales –sin negarlas en lo valioso que las integra–, y el avance hacia propuestas como las que aquí sostenemos. Es común también detectar en estos trabajos de cambio una preocupación compartida por fortalecer la formación práctica de los estudiantes, en diversas instancias de realización; sea al interior de las asignaturas generales y disciplinares; como en materias específicas, y en experiencias en territorios extrauniversitarios. De nuevo la labor no es sencilla, y requiere superar la concepción teórico-práctica unánimemente compartida desde hace largo tiempo; para avanzar en trayectos, experiencias y dispositivos tangibles, observables y susceptibles de acreditación.
En el caso de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Rosario, inaugurando en el año 2016 un nuevo plan de estudios, se generaron instancias de formación práctica que atraviesan directa y transversalmente todo el camino de la Carrera, y se fortalecen en tramos específicos de la misma.
Se definió que esta experiencia formativa debía instalarse desde el ingreso de los estudiantes a la Facultad, para lo cual se constituyó una asignatura en formato de taller, denominada Taller de Acceso a la Información Jurídica, cuya experiencia y fundamentación es objeto de esta propuesta.