Hay una gran diferencia en el recorrido de un estudiante de una carrera disciplinar en comparación con un estudiante de una carrera docente. La recepción de conocimientos va más allá de la disciplina, para abarcar otros dos ejes: la formación didáctica y la experiencia que absorbe de sus propios docentes. La formación didáctica, que incluye tanto las materias del bloque pedagógico como las prácticas docentes, es sumamente enriquecedora en el ámbito personal y profesional del docente en formación porque nos permite abordar nuestro futuro trabajo de una forma más consciente y autónoma. Por otro lado, un alumno que elige una carrera docente aprende y reconstruye su identidad docente al mismo tiempo que ve a sus propios profesores exponer y enseñar en sus clases. De este modo, discierne qué estrategias pedagógicas va a aplicar a futuro y cuáles no.