El concepto de ciudades inteligentes y sostenibles se introdujo para superar los grandes desafíos que enfrenta el desarrollo urbano. Por lo tanto, el crecimiento demográfico y el cambio climático presentan nuevos retos para las administraciones gubernamentales y las empresas de consumo de agua potable. Los sistemas inteligentes de distribución de agua potable deben ser cada vez más eficientes y responder a múltiples restricciones de abastecimiento. Las variables relacionadas a la demanda residencial de agua es uno de los parámetros más difíciles de determinar para modelar en este tipo de sistemas. El objetivo de esta línea es identificar los distintos factores que inciden en el estudio de la demanda de consumo de agua potable a escalas espaciales y temporales, e incorporar modelos que proporcionen estimaciones confiables para predecir el consumo de agua urbana a nivel residencial a corto, medio y largo plazo.