Al tocar un estándar un grupo de jazz genera diversas situaciones de interacción. Desde el punto de vista de la cognición enactiva, en toda instancia de interacción, los improvisadores establecen algún tipo de dinámica dialógica que puede comprenderse en términos de la teoría del participatory sense-making (PSM) (De Jaegher & Di Paolo, 2007). Al comunicarse los músicos activan un proceso de doble vía que pone en juego una negociación de significados materializada por medio del alineamiento expresivo (Leman 2016) sonoro-kinético y donde las fuerzas que conducen el liderazgo o la toma de iniciativa –consciente o inconsciente– se vinculan con, y van más allá de las notas, los ritmos, y las intensidades que se crean. El PSM se configura como un proceso co-constructivo que emerge de la experiencia fenomenológica y corporeizada de los músicos en el marco de una performance en la que tocan juntos. En este trabajo se estudian aspectos del PSM vinculados a la evolución temporal del flujo de liderazgo en la interacción a lo largo de una performance improvisada. Se asume que las fuerzas que guían el liderazgo van intercambiándose a medida que se desarrolla el alineamiento expresivo en el flujo de comunicación.