Este artículo analiza el lugar del exilio de la última dictadura militar en el campo de estudios sobre el pasado reciente argentino e intenta tanto dar cuenta de las líneas más transitadas y que permiten plantear que estamos frente a un territorio historiográfico en expansión, como descubrir cuáles son las actuales áreas de vacancia y las de mayor potencial para la investigación académica futura. Lejos de pretender hacer un examen exhaustivo de la producción que viene acumulándose desde la contemporaneidad del fenómeno hasta hoy, estas páginas constituyen más bien un intento de revisar críticamente una parcela de la Historia Reciente desde el examen de la propia práctica investigativa y de cara a sacar a la luz los dilemas y desafíos que la atraviesan.