La investigación surge a partir de la siguiente pregunta-problema: ¿cómo es la comunicación en La Pirka, pensándola desde: los agrupamientos identitarios, sus experiencias personales y su participación en ferias? La pregunta por las economías sociales y solidarias se origina a partir de la emergencia de múltiples espacios de comercialización alternativos a lo largo de la provincia. Estos, en relación dialéctica, dieron lugar a políticas de acompañamiento tanto a nivel nacional, con una Ley de la Economía Social, como a nivel local, con subsidios a pymes y particulares. Durante el 2003 y hasta el 2015 las políticas sobre el tema apuntaban a una mayor concentración de economías sociales que tendiera a ocupar un tercio del PBI Nacional. Por eso, en primer lugar, pensar la economía social implica tomar una posición política y dar un debate en torno a las prácticas sociales. Además, el trabajar las formas de comercialización y de consumo es pensarnos desde una alteridad contra hegemónica al sistema capitalista liberal, pensarnos inscriptos en un orden Democrático, Estatal y alternativo.