Editorial Claridad fue fundada en 1922 por Antonio Zamora, un inmigrante español de tradición socialista radicado en Argentina desde su adolescencia, con el propósito de educar a los sectores populares. Mediante la publicación de dos revistas culturales -Los Pensadores y Claridad- y cientos de obras reunidas en diferentes Bibliotecas que se vendían en papel de mala calidad, a precios muy bajos y en espacios urbanos no especializados, la editorial se consagró como mediadora entre un nuevo público y la cultura “letrada”.
A pesar de tener preferencia por la ficción -en términos generales- y por el realismo social -en particular-, Claridad publicó textos de divulgación científica, ensayos, historia, tratados filosóficos, literatura de viajes, biografías y poesía. En esta oportunidad nos ocuparemos de la biblioteca Los Poetas (colección que apareció en 1924) y de los escritores modernistas que figuran en el catálogo de la misma, a fin de indagar cuál es la relación entre este movimiento literario y los objetivos de la editorial creada en el marco del ideario socialista.
Si bien el modernismo surgió como una crítica radical a la burguesía, a comienzos del siglo XX se convirtió en la estética de los grupos dominantes. Por lo tanto, ¿cómo promover el compromiso y el cambio social de los sectores populares a través de un movimiento literario que conjugó la renovación métrica y lexical con la brevedad y el fragmentarismo de la vida moderna, el cosmopolitismo, el indigenismo, la cultura grecolatina, la fascinación por el exotismo, la belleza y el lujo?, ¿a qué se debe la frecuencia de estos autores en Los Poetas?, ¿existe un vínculo ideológico entre ellos y la empresa cultural? Estas y otras preguntas serán tratadas en el presente trabajo.