En junio del año 1977, Charly García ya era uno de los músicos más importantes de la cultura rock y un artista reconocido en el país. La disolución de Sui Generis y la posterior creación de La Máquina de Hacer Pájaros en 1976 lo mostraba inquieto y con ganas de renovar los votos en la música progresiva y de orientación sinfónica. No obstante, sus movimientos no pasaban desapercibidos para la dictadura cívico militar que había tomado el poder el 24 de marzo de 1976. El régimen daba cuenta de la formación de su nuevo grupo y reconocía la producción de su primer disco el mismo año del golpe de Estado.