A diez días de la asunción del ex presidente Raúl Alfonsín,más precisamente el 1º de diciembre de 1983, la Revista Gente, en su número 958, presentó la estrategia discursiva y política que coronaría su presente durante el advenimiento democrático: la constante vinculación de la palabra “terrorismo” con las “agrupaciones subversivas”, la consiguiente exaltación de la llamada “Teoría de los dos demonios” y la generalización de sus prácticas mediáticas y de acción psicológica en el marco de la última dictadura cívico militar.