En Enero del año pasado, el Sr. D. Rafael Hernández, hacendado del partido de Pehüajó, mandó á la Facultad tres corderos enfermos, con el fin de observarlos, determinar la causa del mal, y al mismo tiempo buscar el medio de combatirlo.
El señor Decano de la Facultad me encargó de practicar los estudios del caso.
Circunstancias independientes de mi voluntad me han im pedido hasta ahora relatar los resultados á los cuales he llegado.