El continuo crecimiento de la aviación origina sucesivos aumentos en la capacidad de la infraestructura del aeropuerto, como así también, la necesidad de optimización del espacio aéreo. Al mismo tiempo, la navegación aérea ha ido evolucionando en el tiempo con la inclusión de nuevos equipamientos (y por ende nuevos procedimientos), permitiendo así a las aeronaves un vuelo más seguro y eficiente. Con la llegada de tecnologías basadas en posicionamiento satelital (GNSS), se ha logrado la operación con una precisión cada vez mayor, permitiendo de esta manera optimizar las rutas de vuelo (ICAO, 2005). Esto implica reducción de tiempos de vuelo (Nakamura & Royce, 2008), consumo de combustible, emisiones gaseosas, impacto acústico (Hogenhuis, Hebly & Visser, 2008), carga de trabajo para los controladores y pilotos (Sprong, Haltli, DeArmon & Suzanne, 2005).
La mejora de la eficiencia operativa derivada de la aplicación de navegación de área (RNAV), y los requisitos que se definen en términos de exactitud, integridad, disponibilidad, continuidad y funcionalidad, necesarios para las operaciones propuestas en el contexto de un concepto de espacio aéreo en particular (ICAO, 2008), permiten un uso más eficiente del espacio aéreo, sin afectar la seguridad de las operaciones aéreas.
El presente trabajo se desarrolla dentro del marco de referencia que componen organismos internacionales de referencia respecto de cambio climático (IPCC, 2014; Naciones Unidas, 1992) y aviación (ICAO, 1999), comprometidos con el desarrollo armonizado y económicamente viable de la actividad.
Es dentro de este marco, que se plantea en el presente trabajo; calcular las distancias recorridas por aeronaves en rutas seleccionadas, determinar el consumo de combustible promedio en vuelo normal y sin novedades en base a criterio de consumo de la EEA (2013), y en base a esto determinar la cantidad de HC, CO y NOx por ruta. Asimismo, se plantea realizar un análisis comparativo para los destinos seleccionados en rutas ATS y RNAV.
En base al movimiento de aeronaves se toma como aeropuerto de origen al Aeroparque "Jorge Newbery" de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y como aeropuertos de destino a los aeropuertos de Córdoba, Iguazú, Mendoza, Bariloche y Salta.
Mediante el uso de Cartas de Navegación, Manual de Operación de la aeronave y una metodología establecida por la EEA (2013) se cuantifican las distancias recorridas, tiempo de vuelo, consumo de combustible y emisiones gaseosas asociadas, generadas en el normal funcionamiento y uso de aerovías comerciales regulares por parte de la aeronave seleccionada para así comparar con las rutas RNAV.
Se utilizará para el desarrollo de este trabajo una aeronave del tipo Boeing B737-800, considerando, tanto para el despegue como la aproximación, trayectorias con un ángulo de elevación constante, situación que refleja con suficiente precisión los procedimientos estándares utilizados actualmente.