El estudio de la morfología externa de los insectos es de fundamental importancia para la entomología agrícola y particularmente en el manejo de plagas ya que nos permitirá una correcta identificación de las mismas, reconociendo las principales estructuras externas y sus funciones. Las características externas nos permitirán agrupar a los insectos en grandes grupos de iguales características (órdenes, familias, géneros y especies). También nos aportar información sobre su biología y comportamiento.