En este artículo planteó algunos desencuentros entre la historia que se construye en la Academia, en la Universidad, y la que aparece en los currículos, en los programas, en los textos y en las prácticas de la historia escolar. El saber histórico escolar debería ser un saber socialmente útil para el conjunto de la ciudadanía. El futuro de la historia escolar depende de ello. Señalaré, en primer lugar, la importancia de la formación en didáctica de la historia y de las ciencias sociales del profesorado. Posteriormente analizaré las relaciones entre la historia y la historia escolar. Y concluiré remarcando la urgencia de repensar la formación inicial y continuada del profesorado de historia para intentar superar los problemas derivados de una historia escolar alejada de los resultados de la investigación histórica y poco útil para posicionar al alumnado ante los problemas del mundo.