Este artículo propone compartir el trabajo que estudiantes de 6° año han desarrollado en el marco del Taller Optativo “Reescribir el teatro clásico: Hamlet del papel a la acción”, una propuesta para la Orientación de Ciencias Sociales. Como artista avocada a las artes escénicas, celebro y considero de suma importancia abrir este tipo de espacios en donde es posible exponer los procesos porque, en la mayoría de los casos, son tanto más trascendentales que los “resultados” (sobre todo en un espacio pedagógico). Si bien en la particularidad del caso lxs alumnxs montaron con éxito una obra, han logrado comprender que el resultado no es aquello que se muestra, sino las herramientas que se adquieren gracias a un rico proceso de aprendizaje y experimentación. Lo interesante, lo que siempre debería estar en juego, es generar material para reflexionar. Ése es el propósito del teatro y del arte en general. Interpelar en las personas, transformarlas. Más allá del resultado final, de la crítica, de la devolución. Nada puede hacerse con las subjetividades de cada espectador, sus gustos, sus preferencias… pero sí podemos estar seguros de haber generado un trabajo que nos ha enriquecido en su proceso.