El sistema universitario público argentino asumió, en los últimos años, su condición de democrático y masificado. Partiendo de cifras que parecieran indiscutibles, el debate sobre las altas casas de estudio se ha vuelto a vincular con los problemas presupuestarios y con algunos cuestionamientos a su reciente expansión. Surgen aquí preguntas que, si bien podrían generar largos debates filosóficos, también tienen respuestas en términos prácticos: ¿qué es la universidad pública en nuestro país? ¿Cuántas universidades son necesarias? ¿La universidad pública es un gasto para el Estado?