Los recuentos estelares en todas las latitudes galácticas por Seares, van Rhijn, Joyner y Richmond (1925) fueron analizados por el método del esquema de Kapteyn. Cinco esquemas fueron perfeccionados simultáneamente para las cinco latitudes galácticas típicas: IBI = 90°0, 18°4, 5º7, 1°8, 0°0.
Se aplicó una propia fórmula no lineal para la absorción interestelar. El resultado final es el siguiente:
Todas las observaciones desde 90°0 hasta 0°0 de latitud no pueden ser representadas por una sola función de luminosidades. En pequeñas alturas sobre el plano galáctico central (151 < 100 pc más o menos) hay que adoptar una función de luminosidades del tipo Schilt y fuera de esta capa central ( IZI > 100 pc más o menos) vale la función clásica
de van Rhijn. Hay que anotar especialmente que el pasaje de un tipo de funciones de luminosidad al otro, a la altura de IZI = 100 pe más o menos, es completamente abrupto.
De esta manera nuestra Vía Láctea contiene en efecto un "tablón ecuatorial" extremadamente rico en estrellas de las magnitudes absolutas más débiles. Pero este "tablón rico en estrellas"«posee en el lugar de nuestro sol un "hueco" (según el análisis en IBI = 90°), en concordancia con la suposición moderna, de que nuestro sol se encuentra entre dos brazos de la espiral de nuestro sistema galáctico.