Acerca de Neus Espresate se han dicho muchas cosas, todas ellas elogiosas por cierto. “Neus, Neusita, Nieves Espresate”, de ojo “infalible” y “apasionada de la política”, la describió Elena Poniatowska, para el homenaje que le realizó la Feria Internacional del Libro de Guadalajara en 1995; José Emilio Pacheco expresó: “Neus, fue una suerte haber sido tu contemporáneo, un privilegio ser tu amigo, un orgullo contarme entre tus autores”. Y Roger Bartra agregó, en la misma ocasión: “Neus Espresate, al frente de Ediciones ERA, ha insistido durante muchos años en producir esos objetos abominables y superfluos que son los libros. Su extraordinario trabajo cotidiano, desde el corazón de la sociedad civil, ha significado una fuente de agua fresca para la intelectualidad y para los ávidos lectores”. La lista podría seguir, justa e hiperbólica a un tiempo.
Es que el nombre de Neus Espresate, unido indefectiblemente a Ediciones ERA, adquiere un protagonismo central en el universo editorial cultural latinoamericano de los últimos cincuenta años. Si ERA es, aún hoy, uno de los proyectos editoriales independientes más destacables del continente, la figura de Neus editora, que evita toda exposición pública y toda épica de su labor, constituye también una rara avis en el universo de los editores. Justamente por esa escasa predisposición para la figuración, Neus daba pocas entrevistas. La que aquí presentamos tuvo lugar en su casa de Coyoacán, en la Ciudad de México, el 21 de marzo de 2013, gracias a las amables gestiones de quien fue su autora y amiga, Guiomar Rovira. En una suerte de charla informal, Neus recorrió los comienzos y la historia de su editorial, reflexionó acerca de su catálogo, brindó con elocuente generosidad memorias, materiales y anecdotario para una investigación que por entonces apenas comenzaba. Seguros de la importancia de su voz, su testimonio y sus experiencias, publicamos esta entrevista y la dedicamos a su memoria, y a la de dos de sus autores y colaboradores más queridos: José Emilio Pacheco y Carlos Monsiváis.