La toxocarosis es una zoonosis frecuentemente diagnosticada en humanos de cualquier edad y sexo. Algunas ocupaciones aumentarían el riesgo de adquirir esta parasitosis. Una de sus formas de presentación, la neurológica, tanto en adultos como en niños, a veces tiene consecuencias graves y es necesario tenerla en cuenta en el diagnóstico diferencial de las enfermedades convulsivas.