La explosión de las imágenes visuales en el mundo contemporáneo es un fenómeno que no creo necesario demostrar, sin embargo el impacto que esto ha producido en las diversas miradas sobre la historiografía es lo que me propongo con este trabajo. Tomaré las formas visuales que a mi entender posee la obra de Carlo Ginzburg en su apuesta a la microhistoria con "El queso y los gusanos". Es una mirada que apela de manera insistente a enunciaciones que evocan imágenes visuales del pasado que encuentran en la actualidad vigencia por el complejo entramado lingüístico/visual al que apela. Se podría pensar que en la actualidad es imposible escindir la imagen de la palabra pero intentaré abrir una cierta perspectiva respecto del tema