Una visión social de las prácticas tecnológicas considera que las herramientas tecnológicas se componen tanto por su materialidad (artefactos y materiales) como por los conocimientos que las conciben en la sociedad (a partir de la teoría memética) y los métodos que permiten su utilización (know-how). La evolución de la tecnología puede comprenderse análogamente con la evolución biológica a través del análisis de las características y las variaciones fenotípicas de los artefactos tecnológicos. Para analizar las prácticas tecnológicas involucradas en una disciplina artística como es la animación, es necesario comprender la evolución de los distintos artefactos que funcionan como herramientas dentro de la misma. Definiendo la animación stop motion como animación y captura fotográfica de distintos materiales cuadro a cuadro, podremos distinguir las herramientas en dos grupos: medios de captura de la imagen y elementos capturados.
Partiendo de la idea de que toda herramienta tecnológica es desarrollada con el fin de satisfacer un deseo humano, analizamos las características y funciones que componen los artefactos desarrollados, su evolución a lo largo de la historia y su adaptabilidad, siendo esta la capacidad de las características fenotípicas de cumplir sus objetivos y, por lo tanto, de replicarse. Como objetivos de las herramientas tecnológicas en animación podemos distinguir, por un lado, la eficiencia, que implica la reducción de tiempos, costos y complejidad de la producción; y, por el otro lado, la eficacia, que entraña el control sobre los aspectos estéticos visuales de la animación. Al mismo tiempo, la adaptabilidad está condicionada por la accesibilidad de los artefactos, determinada por las características propias de nuestro contexto tecnológico.