El crecimiento del uso de plantas medicinales por las sociedades occidentales ha puesto en evidencia, por acción u omisión, la valoración que las comunidades ancestrales le asignaron a la madre tierra durante sus prácticas milenarias. Siendo Sudamérica un territorio tan versátil geográfica y culturalmente, y a su vez escenario clave para la comprensión de las identidades de las sociedades hegemónicas y de las comunidades locales, en este trabajo, se pretende indagar en el cruce de esta amplia gama de miradas, concepciones del cosmos e interaccionismo simbólico. Por un lado, para poder poner en diálogo las distintas valoraciones del mundo a través del uso ritual de la planta, conocida popularmente como ayahuasca, y por otra parte, con la intención de generar un recorte actual sobre un tema que se encuentra en constante movimiento y que ha dejado de ser exclusivamente una práctica amazónica para pasar a formar parte de usos turísticos, mercantilizados u holísticos por el colectivo dominante.
Desde una perspectiva de la construcción social de la salud, esta investigación tiene como objetivo producir sentidos ligados a los discursos que se entremezclan entre la medicina, la cultura tribal, lo comunitario, el consumismo y los usos recreativos de plantas maestras. En este orden de ideas, para la realización de este proyecto, resulta necesario revisar prenociones, incluso contenidos académicos, para entenderlos como herramientas y no como recetas teóricas. El amplio universo simbólico que rodea y moviliza al uso de plantas con fines terapéuticos y espirituales, está intrínsecamente ligado al universo simbólico de la medicina occidental. Lo que diferencia a estas dos cosmovisiones es la construcción de una sobre la otra. Las historias y relatos dan cuenta de este difícil diálogo que se da hace más de quinientos años en el amazonas y en todo el territorio latinoamericano, en donde subyace la expropiación, el extractivismo y la apropiación cultural como puntos claves para entender la actual banalización de medicinas, como también el tabaco y la coca, industrializadas y de uso cotidiano en las grandes ciudades.