La trichinellosis es una zoonosis ampliamente distribuida a nivel mundial, se produce al ingerir carne cruda o insuficientemente cocida que proviene de animales infectados con Trichinella spp. Es una enfermedad reemergente, de denuncia obligatoria ante el Servicio Nacional de Sanidad Animal y Control Agroalimentario (SENASA), de gran importancia en Salud Pública. Los signos clínicos en animales son inespecíficos. Para su diagnóstico se pueden utilizar técnicas directas (Ej. Triquinoscopía, técnica de digestión artificial (DA), métodos bioquímicos, métodos de biología molecular, etc.) o indirectas (Ej. Enzimoinmunoensayo indirecto (ELISA), Western Blot, inmunofluorescencia indirecta). Las diferentes técnicas diagnósticas poseen ventajas y limitaciones. Para determinar el diagnóstico de un individuo deben utilizarse siempre técnicas directas, ya que las indirectas pueden arrojar resultados falsos negativos, si la muestra es obtenida durante el período ventana de bache inmunológico. Debido a que la sensibilidad diagnóstica de la técnica de DA evita la infección clínica de seres humanos, no así la subclínica, si se empleará de forma simultánea ELISA y DA, se podría facilitar el diagnóstico, eliminando los animales resultantes positivos al ELISA de la granja (facilitando el trabajo en el frigorífico y reduciendo costos de producción). Además, permitiría formular programas de prevención.