Este trabajo parte del reconocimiento que frente a nuevos escenarios económicos y demandas productivas, ambientales, sociales y políticas, la planificación estratégica urbana y territorial es una herramienta posible para garantizar el uso sustentable de los recursos, la generación de condiciones de equidad social en el acceso a los beneficios que las ciudades generan, y la creación de posiciones de certidumbre y legitimidad necesarias para la inversión pública y privada de largo plazo.
En este marco, se plantea que los escenarios para el desarrollo de la ciudad y su región, se basan en la voluntad de la comunidad; es la que sin duda, debe buscar la transformación local para adelantarse a los cambios inexorables, preverlos y concertar una respuesta colectiva. Necesitará sin embargo, de la capacidad de liderazgo de instituciones con una fuerte relación con la gente y de las oportunidades que brinde el contexto; factores que conjugados, signarán las posibilidades concretas de lograr un proceso de progreso.
En esa combinación, puede sumarse la capacidad institucional a un escenario favorable, pero también pueden desaprovecharse las posibilidades de un contexto positivo. Las diferentes alternativas, condicionarán el futuro de la comunidad y la evaluación de sus características definirán el papel que deberá cumplir el Estado Local y las organizaciones de la sociedad civil y cuáles serán las herramientas necesarias para desempeñarlo con éxi