La voluntad de la comunidad del Partido de General Pueyrredón -en la que la ciudad de Mar del Plata ocupa un lugar central- es la que, sin duda, debe buscar la transformación local para adelantarse a los cambios inexorables, preveerlos y concertar una respuesta colectiva. Necesitará, sin embargo, de la capacidad de liderazgo de instituciones con una fuerte relación con la gente y de las oportunidades que brinde el contexto; factores que conjugados, signarán las posibilidades concretas de lograr un proceso de progreso.
En esa combinación, puede sumarse la capacidad institucional a un escenario favorable, pero también pueden desaprovecharse las posibilidades de un contexto positivo a partir de un deficiente liderazgo institucional. En la peor de las hipótesis, la comunidad puede encontrarse con la desalentadora situación de estar en manos de organizaciones incapaces para enfrentar un panorama general difícil o bien puede contar con instituciones locales calificadas, hábiles e imaginativas, pero que deben desenvolverse en un contexto desfavorable, de escasas oportunidades.
Una de estas cuatro alternativas condicionarán el futuro de la comunidad marplatense y la evaluación de sus características definirán el papel que deberá cumplir el Estado local y las Organizaciones de la Sociedad Civil y cuáles serán las herramientas necesarias para desempeñarlo con éxito.