Los territorios en el mundo afrontan en este fin - inicio de siglo, una etapa de definiciones fundamentales. Hoy conforman un escenario interdependiente y de vertiginosa dinámica, donde las comunidades se esfuerzan por preservar su identidad y fundamentalmente por identificar los caminos adecuados para lograr prosperidad.
La Universidad debe asumir la responsabilidad de participar y aportar a ese proceso y debe, por lo tanto, crear los espacios para contener la complejidad de cada una de estas exigencias, resolviéndolas en un ámbito de excelencia.