El enfoque de los programas de lenguas extranjeras ha propiciado el desarrollo de la competencia comunicativa en sus diversos aspectos: gramatical, discursivo, sociolingüístico y estratégico. La literatura cumple con ese objetivo y aporta un plus estético. Considerada como práctica cultural, puede contribuir con el desarrollo de la competencia comunicativa, particularmente en la consecución de dos objetivos: la reflexión lingüística sobre los usos especiales de la lengua, propios de la literatura, y la ampliación del horizonte sociocultural de los alumnos extranjeros, inmersos en un contexto que les es ajeno y que la literatura puede llegar a interpretar. En las siguientes páginas nos proponemos explorar el rol de los textos literarios como punto de partida de reflexiones culturales y su valioso aporte a las clases de ELE, planteando la necesidad de profundizar en los estudios sobre esta temática.