En este trabajo se considera la gestión documentaria sanitaria argentina a partir de la irrupción de la historia clínica electrónica, como documento médico legal. Se analiza el uso e impacto provocado en la relación entre el profesional, el paciente, establecimientos hospitalarios y el sistema de salud en general. Se analizan los beneficios que propone para el avance médico y para el derecho del paciente, sin embargo con independencia de la tecnología que se use, hay que tener en cuenta que la opción tecnológica puede llevar a situaciones complejas, porque sin políticas adecuadas, los datos generados por sistemas anteriores resultan inaccesibles para las organizaciones e incluso para el mismo paciente. En el modelo de privacidad propuesto se empodera al paciente respecto la historia clínica, para controlarla, reguardar su integridad, unicidad, inviolabilidad, intimidad, privacidad y confidencialidad. Este se convierte en el actor fundamental para hacer efectivos sus derechos a la salud e información. La propuesta consiste en fomentar la accesibilidad del paciente a la HCE, garantizando la seguridad e incrementando la eficacia y eficiencia de los prestadores en las organizaciones, mediante la figura del delegado de protección de datos se plantea una estrategia de gestión jurídica y técnica interdisciplinar basada en interoperabilidad.