Una de las teorías más recientes, nacida de necesidades prácticas y que poco a poco se va organizando y desarrollando en una nueva ciencia, es la Cibernética. Fué definida por el matemático e ingeniero norteamericano Norbert Wiener, uno de sus creadores, como “la ciencia del control y la comunicación, en el animal y en la máquina”. Wiener atribuye a esta ciencia tal importancia, que la cree capaz de ejercer un papel decisivo en el gobierno de las cosas y de los hombres, y de ahí la elección del nombre “cibernética”, derivado de una palabra griega que significa el que gobierna o pilotea un navio. Es, pues, una ciencia dirigida a establecer leyes y conclusiones para el mejor gobierno de los mecanismos de cualquier naturaleza que sean. Sus conclusiones pueden aplicarse tanto a las máquinas en el sentido usual, como en el sentido más amplio que aquí tiene la palabra “máquina”. Para la Cibernética, máquina es todo aquello que realiza una transformación; puede, pues, ser un dispositivo mecánico, eléctrico, óptico, el sistema nervioso de un animal o del hombre, un sistema social o un sistema económico.