En varios países del mundo la población de mujeres en período de lactancia, accede fácilmente a ciertos medicamentos, a través de la libre comercialización de estos. En proyectos de extensión llevados a cabo entre 2014-2016, sobre la automedicación en las embarazadas, se obtuvieron resultados que indicaron un elevado promedio de mujeres embarazadas o en período de lactancia que se automedican, reportándose de 43 % al 59 % de los casos. Entre los medicamentos que más frecuentemente consumen en esos estados (embarazo y lactancia) son antibióticos y antiinflamatorios no esteroides (AINES) de venta libre. . En estudios consultados con evidencia científica se indica que los fármacos antes mencionados, pasan rápidamente a la leche materna, pudiendo causar efectos inmediatos en el crecimiento y desarrollo de los lactantes, En ciertos casos, pueden causar deficiencias o inhibición en el crecimiento, escaso desarrollo cerebral, mutaciones genéticas, insuficiencia hepática, etc. Esto ocurre debido a que la mayoría de los medicamentos , poseen un importante potencial para atravesar desde el plasma materno hacia la leche mamaria. Por ello, se considera oportuno realizar acciones preventivas de automedicación, destinadas a las mujeres que amamantan, acompañadas del cambio de conducta en las mismas, para preservar la salud del lactante.