La comercialización de la producción es uno de los principales problemas que afectan a los pequeños agricultores. Aun existiendo Programas de Desarrollo Rural que han tenido éxito en cuanto a la mejora en los aspectos productivos, el eslabón comercial aparece como uno de los “cuellos de botella” más difíciles de superar (Cattaneo, 2008). Esto se agrava en la actividad hortícola, dada la efímera vida útil de las hortalizas, lo que disminuye aún más el poder de negociación de los productores familiares.
En este marco, el proyecto plantea explorar canales de comercialización alternativos y distintas estrategias que les posibilite a las familias horticultoras una apropiación mayor del valor por ellos mismos generados (y con ello su permanencia en la producción) y a la vez un menor precio para el consumidor. Se trabajará con una Cooperativa que nuclea a más de 400 familias productoras de La Plata gestionando canales directos de comercialización, ya sea vía ferias y venta por bolsones. Las mismas se prevén realizar en la región como así también en el Área Metropolitana de Buenos Aires. El proyecto posibilitará ajustar el proceso de producción, manipuleo, embalado, logística y venta directa final, además de solventar una serie de gastos iniciadoras.