El presente trabajo aborda la dimensión autobiográfica como una herramienta presente en las producciones artísticas contemporáneas que ponen en escena el cuerpo del artista. Se partirá del supuesto de que en este uso del cuerpo como espacio representacional y materialidad fundante de la obra, aquella dimensión autobiográfica articula con una dimensión social-contextual de naturaleza política-crítica. En este marco, serán analizadas las producciones de dos artistas latinoamericanas que involucran la corporalidad, la acción y la vivencia íntima dando
cuenta de un giro performativo: un giro en el que dialogan los nuevos modos de pensar la escena del arte desde un sentido profundamente subjetivo, pero a la vez indisociable del entramado social en que la obra cristaliza.