Actualmente existe evidencia sobre la relación del cronotipo vespertino con una alimentación menos saludables y un descanso inadecuado, lo que aumentaría el riesgo de desarrollo de problemas metabólicos y un deterioro en la capacidad de aprendizaje y atención, entre otros problemas. Ante la falta de antecedentes en nuestro país que estudien el impacto del cronotipo y la crono disrupción en la salud y el aprendizaje, plantemos la posibilidad de realizar un abordaje que integraría 2 etapas: la primera, un estudio transversal observacional donde se determinará el cronotipos (a través del cuestionario de Múnich) se evaluara el estado nutricional (a partir de la determinación de peso, talla, perímetro de cintura y porcentaje de grasa), se valorara la ingesta alimentaria y se administrara el test de atención Global y Local( AGL) en niños de 8 a 12 años que forman parte de 2 instituciones educativas públicas y una ONG . Posteriormente se llevará adelante una intervención educativa a través de talleres y clases brindadas desarrollando cuestiones vinculadas a mejoras en la calidad y cantidad de descanso y la alimentación asi como la influencia de cronodisruptores en diversas esferas de la salud .