El almacenamiento es un elemento de gran valor en la explotación de los servicios de hidrocarburos debido a que actúa como un pulmón entre producción y transporte para absorber las variaciones de consumo; permite la sedimentación de agua y barros del crudo antes de despacharlo por oleoducto o a destilación y brinda flexibilidad operativa a las refinerías que actúan como punto de referencia en la medición de despachos de producto.