Las plantas sintetizan metabolitos que tienen propiedades antimicrobianas, son ambientalmente amigables y podrían constituir una alternativa a los antimicrobianos tradicionalmente empleados reduciendo los efectos adversos sobre el medioambiente. Se evaluó la actividad antimicrobiana y alguicida de isoeugenol, ácido vainillínico y carvacrol con el objetivo de incorporarlos en formulaciones de recubrimientos ecológicos protectores contra el biodeterioro y pinturas antiincrustantes y antifouling.