La historia del uso del gas en nuestro país puede sintetizarse en tres etapas claramente definidas. La primera de ellas se inicia al radicarse una compañía cuya actividad comercial consistía en la venta de los subproductos provenientes de la destilación seca del carbón de hulla y accesoriamente el gas, considerado un producto residual de aquella. El segundo período se inicia en 1945, al disponerse la nacionalización de los servicios públicos del gas natural de la ciudad de Buenos Aires, y el tercero comienza con el aprovechamiento y explotación intensiva del gas natural.