Ortega y Gasset y Marías consideraron que el pautado temporal del proceso histórico lo habría de marcar la posibilidad de detectar la formación de generaciones. En nuestro país, particularmente Tau Anzoátegui y Pro destacaron el interés que se produjo en las primeras décadas del siglo pasado por el abordaje de las generaciones en los estudios históricos. No tanto como noción sino como encuadre de determinados grupos de sujetos que, a través de sus ideas, podían ser entendidos como referentes e integrantes de tal o cual generación y, con ello, reconstruir su momento, aportes y visiones de mundo.
Varios intelectuales iniciaron un camino de referencia continua a las generaciones: Matienzo, Korn, Rodolfo Rivarola y Furlong, entre otros. Todos ellos observaron una duración determinada dentro de la cual se vive en un cierto orden y ante una transformación habría de conmoverse aquel. Tomando cuenta del valor que este enfoque presenta analizaremos los sucesos de la “Reforma Universitaria” de Córdoba del año 1918 a la luz de las teorías generacionistas y relevaremos ciertas particularidades que mostraron sus hacedores como Deodoro Roca, Ernesto Garzón, Horacio Valdés, Gumersindo Sayago, Ismael Bordabehere, etc. para ver hasta qué punto la línea de proyección que generaron llega a nuestros días al tiempo de vivir la educación superior universitaria.