El 30 de octubre de 1983, después de sufrir más de siete años de dictadura, la mayoría del pueblo eligió presidente al Dr. Alfonsín, el candidato de la Unión Cívica Radical. De este modo, se produjo la derrota del Partido Justicialista por primera vez en una elección sin proscripciones. En este artículo se examinanlos editoriales del diario La Nación que, durante los dos primeros años de la renaciente democracia, apuntaron a la construcción de una nueva tradición político-institucional que pusiera fin a la tradición de los gobiernos de líderes de masas. El matutino, en su carácter de “actor político”, emplearía con asiduidad esta columna para señalizar a los distintos actores políticos de esa coyuntura, sobre todo al partido gobernante y al principal partido de la oposición cuál era el derrotero que debían transitarpara consolidar la institucionalidad que anhelaba.