En este libro nos proponemos revisar la planificación de políticas de comunicación desde una epistemología feminista. Para ello analizamos los protocolos que se implementan en universidades públicas y las políticas llevadas adelante por la Defensoría del Público. Indagamos la producción de sentidos sexistas de los medios de comunicación. Revisamos la apropiación de las tecnologías, usos y accesos teniendo en cuenta el género. Abordamos los enfoques de planificación comunicacional, situándonos desde un punto de vista que interpela lo aprendido de manera crítica y decolonial, revisando en profundidad nuestras prácticas profesionales, dando cuenta de que no es posible el fortalecimiento de la organización comunitaria si no partimos de las nociones, experiencias y conocimientos que albergan las personas con las que trabajamos. La redacción de un proyecto será entonces la enunciación de un deseo a futuro, un deseo posible no carente de errores, porque —como en toda trama social— lo que prima es la contingencia.