El discurso neoliberal se presenta a sí mismo como panacea para lograr una sociedad sin fisuras y, desde ese plano, el foco está puesto enla construcción de un relato temporal específico y en la función activa de una memoria a corto plazo. Desde ese plano, el modelo neoliberal plantea una ética social del Estado debilitada, que constituye un tipo de ciudadano particularizado y con subjetividades que lo atraviesan en sus prácticas y decisiones.Particularmente, este trabajo precisa las características de temporalidad existentes tras la llegada de la Alianza Cambiemos al poder político, y también puntualiza en su constante empleo de deshistorización y de amplificación de una memoria recortada y de tiempo breve. Ante esto, sirve pensar en las configuraciones subjetivas y las acciones particulares que extreman la individualización, ensalzan la noción meritocrática y desdeñan la organización política en pos de una desmemoria estratégica.