En los últimos meses se ha estado debatiendo si Estados Unidos y China se encuentran o no en una “carrera armamentística” en el plano de los avances tecnológicos de la inteligencia artificial.Para ilustrar sucintamente el panorama, algunos autores argumentan que la tensión actual en el plano comercial que tiene enfrentado a Donald Trump con Xi Jinping está vinculada con dicha rivalidad tecnológica, dado que se busca limitar las capacidades de las compañías chinas a través de sanciones y aranceles, principalmente a las que operan en el sector en cuestión, y así contrarrestar los avances que China en inteligencia artificial. La temática excede largamente el espacio disponible aquí, pero es posible extraer algunas reflexiones que pueden ser de utilidad para pensar el futuro de la defensa en Argentina, si me permiten el paralelismo.