En los primeros meses de la administración de Donald Trump se esperaban definiciones de política exterior que marcasen la impronta de su administración, en especial desde y hacia América Latina en los temas de agenda que vinculan a la potencia continental con nuestra región. Sin embargo, en el período abarcado por este Anuario podemos mencionar que no ha habido una política planificada y una agenda definida hacia Latinoamérica, sino más bien lo que podríamos denominar una política reactiva. La única excepción a esta afirmación es el seguimiento de cerca que el Gobierno norteamericano hace a la situación política de Venezuela y la presión que ejerce sobre algunos países latinoamericanos para que éstos alineen sus pol íticas exteriores con los intereses de los Estados Unidos. En este artículo nos proponemos repasar algunos de los temas que surgieron en el vínculo Estados Unidos - América Latina y en particular con Argentina.