El 5 de junio de 2017, en un movimiento de impactante radicalidad, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Bahréin y Egipto retiraron sus respectivos embajadores de Qatar e impusieron un bloqueo terrestre y aéreo sobre el emirato. El argumento esbozado fue el s upuesto apoyo de Qatar al “terrorismo” y su acercamiento al enemigo por antonomasia del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG): Irán. Si bien el conflicto entre los socios es de larga data y puede remontarse al año 1995 cuando el padre del actual emir qatarí derrocó al suyo para quedarse con el trono, a partir de los levantamientos árabes comenzados en Túnez en diciembre de 2010, la relación de los países del Golfo se ha tensado hasta un punto de no retorno.