Intentamos dar forma a experiencias, lecturas y testimonios que nos ayuden a encontrar un acercamiento a algunos aspectos, de los innumerables, que hacen a la complejidad que vive la escuela argentina hoy.
Analizar a la escuela como “organización” es situarla en un lugar y en un tiempo determinado, con relativa autonomía y “atravesada” – como toda organización – por las instituciones de la sociedad. Esa permeabilidad pone límites a la posibilidad de la organización de darse sus propias normas y necesitará compatibilizar con las “instituídas” socialmente. No se anula el potencial “instituyente” de la organización por el proceso de atravesamiento, ya que lo instituyente es una actividad de las organizaciones y los grupos que las integran, que da lugar al cambio de lo instituido.
En el encuadre de la escuela como organización es que adquieren sentido los relatos de escuela. Estos relatos dan cuenta de la percepción que tienen los protagonistas, seres singulares en su contexto y su tiempo, del acontecer motivo de nuestro análisis.