Muchos son los modelos, tomados de la teoría moderna de los metales, que se han ensayado en vano para explicar la superconductividad. Cuando en 1928 Heisenberg <lió solución al problema del ferromagnetismo, la repercusión no tardó en hacerse sentir: la búsqueda de la similitud formal entre ferromagnctismo y superconducción constituyó durante muchos años una de las principales líneas de investigación. Sin embargo, fuera del paralelo entre la teoría de los dominios en ferromagnetismo y la teoría del estado intermedio en la superconducción, no se ha obtenido mayor ventaja. La teoría del estado intermedio, por otra parte, no ataca el problema de la existencia misma de la superconducción.