En la década de los '90, los ciudadanos para poder hacer frente a la crisis comenzaron a buscar nuevos canales de subsistencia. Es en este punto donde aparecen las nuevas formas asociativas de trabajadores.
Una de estas nuevas formas son las empresas recuperadas, las cuales, en Argentina, nacen asociadas a la crisis de 2001. A partir de esto nos preguntamos: la ruptura del trabajo asalariado como eje articulador de la identidad ¿implica una crisis identitaria laboral? ¿puede el trabajo seguir ocupando el lugar central como estructurador de la identidad y de la sociedad.
Esto es lo que se intentará descifrar a partir de este trabajo. Para eso nos concentraremos en la estrecha relación entre construcción de nuevas identidades sociales y nuevas formas asociativas de trabajadores, tomando como caso paradigmático y eje de este estudio a las empresas recuperadas, y analizando un caso testigo.