El concepto de exclusión social proviene de Europa, más específicamente de la tradición Francesa-Republicana, para dar cuenta de una serie de transformaciones acaecidas en la sociedad salarial francesa a partir de 1970, cuando el sistema capitalista imperante deja de lado, su carácter industrial para adoptar su forma financiera (Vázquez, 2004).
Aquel primer momento, se caracterizaba por un crecimiento económico sostenido y un Estado que aseguraba una serie de protecciones y seguridades sociales a amplias capas de trabajadores, integrándolas al sistema. El resultado de este proceso, fue un aumento de la desocupación y la precarización de las relaciones laborales, debilitando el tejido social caracterizado hasta ese momento por ese sistema de protecciones (Paugam, 2000). En este sentido, el término exclusión social comenzó a dar cuenta de la existencia de ciertos estratos de la población víctimas de la coyuntura economía y crisis del empleo.
Ahora bien, se podría pensar también que en Latinoamérica y más precisamente en nuestro país, se produjo un pasaje de una acumulación integrativa- caracterizada por la industrialización sustitutivas de importaciones, la expansión del mercado interno y un fuerte rol del Estado en la promoción del desarrollo y las prestaciones sociales- a una lógica esencialmente excluyente y conformada por el aperturismo externo, las privatizaciones, la centralidad del mercado como asignador de recursos y reproductor de la vida social, y el debilitamiento del Estado en el desarrollo económico y social (Sarmiento, 1997:1).
En este primer acercamiento se puede percibir que el concepto de exclusión social, está íntimamente relacionado con el lugar que las personas ocupan dentro del proceso productivo. Sin embargo, el debate que genera esta problemática radica en la heterogeneidad de situaciones posibles que puede englobar este concepto. Más aún, puede utilizarse para hacer referencia a una situación social de un determinado estrato de la sociedad en un momento histórico anterior (Castel,1991).
Pero, ¿se puede hablar de exclusión social ?; ¿qué es estar excluido?; ¿cuáles serían las características de una situación de exclusión social?; ¿quién excluye, a quién, de qué?.
En un intento por responder a estos interrogantes se abordará esta problemática desde una perspectiva cualitativa, explorando las representaciones sociales, de los deambulantes que asistieron al comedor “Santiago Apóstol” en la ciudad de La Plata en el año 2007, acerca de su situación de “exclusión social”.