Bruno Latour plantea que la sociología clásica, heredera de la obra de Emile Durkheim, se ha dedicado a imponer explicaciones sociales para las acciones e interpretaciones de los actores, comportándose como una ingeniería social comprometida antes en la fundamentación de ciertos proyectos políticos que en el entendimiento de lo estudiado; la tarea que él propone en cambio, tributaria de la microsociología de Gabriel Tarde y denominada sociología de las asociaciones, es la de partir de las acciones e interpretaciones de los actores para explicar lo social, dudando de la existencia y efectividad de la sociedad como un todo ya dado. El interés de esta ponencia será preguntarse por los fundamentos epistemológicos y políticos de la postura de Latour (los trabajos de Tarde y Gilles Deleuze serán centrales en esta parte del recorrido), así como por las consecuencias que podrían desprenderse –en esos mismos dominios epistemológicos y políticos– en caso de que efectivamente sea asumido el fin de lo social como dominio autónomo de la realidad (en este caso sirviéndonos de algunos aportes de Horkheimer, Adorno y Eduardo Grüner).